3 de julio de 2012

Buenos días.

Quiero ser como ese café con leche que queda amargo, como ese dulce despertar que tan solo vivimos en sueños. Quiero ser esa diferencia que nos deja , marcar esa huella que quizá nos obligue a pensar.

Y es cierto, ya no pensamos. Parece ser que nos hemos acomodado hasta tal punto que el pensar lo dejamos para los intelectuales, como si el meditar en algo no estuviera al alcance de todos.
¿Menospreciamos entonces nuestra mente cuando la obligamos a asentir sin más?

Esa pregunta que no todos nos hacemos: ¿Cuando siento?
>Si es verdad que sentimos, pero esa sensación pura que hace que nos estremezcamos ha quedado aparcada, tan solo la sentimos al ver una película, al leer un libro,... porque nos privamos de esa sensación en la vida real.

Acaso ¿Amamos hasta el punto que nos lata el corazón al ver a esa persona día tras día? O ¿Esa sensación muere al pasar unos meses?. Acaso ¿Nos emocionamos al tener un anciano en casa que nos cuenta su historia? ¿Su vida? O ¿Lo aparcamos como si de un mueble más se tratara?. ¿Cuidamos a nuestros enfermos como si en ello nos fuera la vida? O ¿Perdemos las ganas entre quejas?

Carpe diem* señores.
Estas palabras perdieron su significado hace mucho, una mala lectura, un vivir la vida de forma alocada tuvieron la culpa, o quizá nuestro miedo a sentir.

Si realmente supiéramos que ese instante es el ultimo, ninguno de esos besos se quedaría sin dar, ningún te amo quedaría olvidado, cada segundo junto a un ser querido e incluso junto a un desconocido seria vivido con intensidad, con sentimiento.
Nuestra condición nos hace creer que seremos eternos y eso nos hace ser algo más egoístas, pero cuando un medico decide ponernos fecha de caducidad temblamos, amamos, compartimos,... Acaso ¿El miedo a perecer nos hace ser mejores personas? O ¿Es la comodidad que nos permite mirar a un lado?

Carpe diem... acaso ¿Si ese minuto fuera el último decidiríamos no pensar? Créanme cuando digo que ese corto minuto nos permitiría conocer el "sentir", o como algunos lo llaman "ver la luz".

Algunos creen que permitir que los sentimientos salgan es de débiles, personas sentimentales no preparadas para este mundo, pero ¿No será envidia? Un "también quiero sentir y expresar como me siento pero tengo MIEDO".
Miedo a que se rían, a sentirse atacado por desnudar su ser y mostrarse ante el mundo tal y como es.

Pues es más cómodo y cobarde cuando un mendigo pide pan mirar hacia otra parte que pararte a escuchar sus necesidades, sus penas y alegrías, sin saber si para él es su ultimo minuto.

El miedo nos deshumaniza.

Así pues... ¿Cual es la ultima vez que sentiste de verdad?
¿ Y si este fuera tu último minuto?

Ama, siente, grita, llora,... tan solo como tu puedes hacerlo.

__________________________________________________
*Carpe diem: Vive el día. Vive el momento, no lo malgastes.